miércoles, 24 de diciembre de 2008

NUESTRA CAÍDA


"No nos hacen sufrir las cosas sino las ideas que tenemos de las cosas" Epitecto.
Nos atrapan nuestros temores,
hay miedo en la ruptura del hábito,
parecía que más allá de ti, sólo iba a existir la destrucción,
que todos los pilares iban a ser devastados.
Hay quien se protege con la fuerza,
quien se resguarda en la lluvia,
algunos bajo la locura del viento,
otros caemos en la espiral del pensamiento,
nadie quiere salir malherido.
¿Cómo te curarás tú,
el vencido en esta guerra?
estarás deconstruyéndolo todo,
te evadirás en el orden de lo sistemático.
Y ahora, roto el cristal de lo correcto,
todo duele si,
aúnque habrá que comenzar a cicatrizar heridas
si es que aprehendimos el sentido de nuestra caída.

martes, 16 de diciembre de 2008

UN GRITO DE AMOR DESDE EL CENTRO DEL MUNDO

¿A dónde irán nuestros recuerdos?
Todos los momentos maravillosos que hemos vivido. Las puestas de sol que saboreamos juntos, que comenzando en naranja y quedamente se transformaban en rojos, para después tornar a verdes y azules que en la oscuridad más rotunda morían.
Éste un libro que te remueve por dentro, que te incita a la vez a sentir y a pensar; rememorar sucesos de tu vida que sabes nunca más se volverán a repetir, y que transmite al mismo tiempo serenidad e intranquilidad. La serenidad de que todo loque hemos vivido nos acompaña sempiternamente, transgrediendo condicionantes temporales y espaciales. Y la desazón del por qué necesitamos pasar por determinados trances. Meditar sobre el sinsentido de la vida y sobre el sentido que cada uno le puede dar a los sucesos que le tocan vivir.
La paradoja entre lo real y lo que percibimos, lo que dejamos que permeabilice y lo que está sucediendo ahí fuera, la distancia que puede haber entre estos dos mundos en determinadas circunstancias, adquiere carácter conciliador en estas líneas, que escritas con una sensibilidad sublime se acercan más a la lírica que a la prosa.
" En este mundo hay un principio y un fin. Y en ambos extremos está Aki"
Al final aceptamos lo que la vida nos depara, pero no podemos renunciar a nuestros recuerdos.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

DESPERTAR



Te despiertas una mañana y
ya no escuchas el eco de tu voz,
ya no corresponde al nombre que apelabas.
Un hueco, el vacío, al otro lado de la cama.
Esos labios, no son los labios que acostumbraste a besar
la piel cambió hacia un incertidumbre más evidente
los ojos tienen un brillo diferente .
Algo
se llevó la gravedad de aquel que descansaba a tu lado.
A veces recuerdo tu mirada en la oscuridad,
se presentan como el valor del pasado,
la seguridad de los años compartidos,
y la frustación del fracaso.
Ahora te ruborizas al mostrar tu ombligo
ahora te descalzas para besarle en el labio.
¿Acaso nacimos los dos del mismo callejón a oscuras?
Me ases de un hombro
y parece que descanso sobre la arena de antesdeayer,
me reflejo en el hielo de tu virilidad
y camino hacia la otra orilla,
la del deseo y el desasosiego.